Los depósitos y separadores de residuos son contenedores y dispositivos utilizados para gestionar y separar diferentes tipos de desechos con el fin de facilitar su manejo, tratamiento y reciclaje. A continuación, se detallan cada uno:

Depósitos de residuos:

01. Contenedores de basura: Son recipientes donde se deposita la basura doméstica o comercial. Pueden estar diseñados para recoger residuos generales o especializados, como papel, cartón, vidrio, metales, plásticos, orgánicos, etc.
Puntos limpios: Son instalaciones donde los ciudadanos pueden llevar diferentes tipos de residuos, incluyendo aquellos que no se pueden desechar en los contenedores tradicionales, como baterías, aparatos electrónicos, muebles, escombros, etc.
Estaciones de reciclaje: Son lugares destinados a recibir, clasificar y procesar residuos reciclables. Los residuos se depositan en contenedores específicos según su tipo para su posterior procesamiento.

Separadores de residuos:

01. De residuos en origen: Se refiere a la práctica de separar los residuos en el lugar donde se generan (por ejemplo, en el hogar o en una oficina). Los ciudadanos suelen tener diferentes contenedores para separar los distintos tipos de residuos (orgánicos, plásticos, papel, vidrio, etc.).

02. Automáticos: Son sistemas o máquinas que separan automáticamente diferentes tipos de residuos según su composición, tamaño, peso o propiedades magnéticas. Se utilizan a menudo en instalaciones de reciclaje para clasificar grandes cantidades de desechos.

03. Manuales: Los operarios humanos pueden clasificar los residuos en instalaciones de reciclaje o puntos limpios para separar los distintos materiales.

La separación de residuos es importante para mejorar la eficiencia del reciclaje y reducir la cantidad de desechos que se envían a los vertederos, contribuyendo así a la conservación del medio ambiente.